23 de diciembre de 2011

¿Cómo se supone que no me deprima cuando me entero que el único niño que de verdad quiero, quiere a una de mis amigas y que nunca, nunca será mío?
¿Cómo se supone que no me deprima cuando mis mejores amigas prefieren a otras mil veces sobre mi?
¿Cómo se supone que no me deprima cuando todos deben ser mi primera opción y yo soy el plan de reserva de todos?
¿Cómo se supone que no me deprima cuando debo estar siempre para todos y nunca nadie está para mi, y lo peor, creen que sí?
¿Cómo se supone que no me deprima cuando día a día tengo que torturarme con la realidad, a nadie le importo y nunca seré NADA para la persona que es mi TODO, así que, como se supone que debo ser feliz cuando todo a mi alrededor se derrumba?

A veces, sólo quiero escapar, parar el dolor. Rendirme. Irme.

Así que no me digas “Sé feliz y no te deprimas” porque no va a funcionar.